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Mostrando entradas de diciembre, 2023

Lc 2:22-40. "Expectabant redemptionem". "Esperaban la redención".

Jesús nos ha rescatado, ya no vencerá el pecado y Satanás derrotado da sus últimos zarpazos. Emprendió su rebelión, como un rayo cayó en tierra, quiso derrotar a Dios, consiguió engañar a Eva. Pero la Virgen dio el fiat, José la protegería y San Juan lo anunciaría, por salvarnos moriría. En esta historia de amor tú también puedes ser parte, dejando que sea el Señor quien te libre de tus males. Con su sangre te ha comprado, Dios bajó y te ha rescatado, precio infinito ha pagado, no rechaces el regalo. Di: "Cristo confío en ti, como la Virgen María, me dejaré redimir, yo también te doy mi fiat".

Lc 2:36-40. "Non discedebat de templo". "No se apartaba del templo".

Servía a Dios día y noche una mujer muy anciana con ayunos y oraciones, del templo no se apartaba. Los del mundo que se ríen viven entre ruidos vanos, no ven que quien a Dios sirve por ellos está rezando. Yo soy héroe del silencio porque entre este mundo vivo, no vivo en un monasterio pero me aparto del ruido. Es heróico apartarse, renunciar a vanidades y con poco conformarse, pudiendo de mundo hartarse. No sé si dan pena o risa los que se siguen riendo, pues en cuanto te despistas te está esperando el infierno. Para verlos me sumerjo en un bucle espacio-tiempo, pobres... los veo ardiendo, recemos mucho por ellos.

Lc 2:22-35. "In ruinam". "En ruina".

Utilizan a Jesús para justificar males, enseñan algo de luz escondiendo otras verdades. Bendigo tu relación que se basa en el pecado, eso de la conversión no se sabe para cuándo. Es la estrategia del diablo que citando la escritura tienta a cometer pecado mientras la verdad oculta. ¿Revelarán su intención de corruptos corazones? ¿Traicionarán al Señor profanando bendiciones? Hacen sufrir a la Virgen quienes deben alabarla, Purísima desde su origen, su alma a espada traspasan. Muchos deberán caer para luego levantarse, se ha infiltrado Lucifer, arrepiéntanse, no tarden.

Mt 2:13-18. "Omnes pueros". "A todos los niños".

Los Santos Inocentes murieron de pequeños, aquí se halla un secreto para llegar al cielo. Mueren sin voluntad, elegir no pudieron, no tienen libertad, fluyen con los eventos. Son como hojas al viento, almas sin crecimiento, semillas de lo eterno que Dios lleva al granero. Pero yo soy ya viejo, he pecado y aún peco, sin arrepentimiento, no sé cómo hay que hacerlo. No pierdas la esperanza, Dios tiene sus remedios, es don, es pura gracia, intenta rezar esto: "Señor del universo, mi voluntad te entrego, soy débil, también necio, a ti al mando te dejo".

Jn 20:2-8. "Vidit et credidit". "Vio y creyó".

Juan ha visto y ha creído, habla de lo que ha vivido, no nos cuenta un cuento chino, estaba allí y es testigo. Se recostaba en su pecho escuchando sus latidos y se adentró en el misterio, vio morir clavado a Cristo. Jesús lo entregó a María, hijo y madre, madre e hijo, de ella mucho aprendería, su Evangelio de amor hizo. El Apocalipsis narra, desterrado y perseguido, apóstol de vida larga, que vio el final de los siglos. ¿Qué le contaré a mi hermano? Le cuento lo que yo he visto, lo que han tocado mis manos cuando aún estaba perdido. Que Cristo me ha redimido, que no me espera el olvido, que la Virgen nos da signos, que tú puedes ver a Cristo.

Mt 10:17-22. "17. "Cavete autem ab hominibus". "Guardaos de los hombres".

No os fiéis de la gente, que os van a traicionar, no confíes en ti, detente, siempre ronda Satanás. Os odiarán por mi nombre, y tú también te odiarás, tú también eres un hombre, también me traicionarás. ¿Qué me dirás en el juicio? ¿Qué abogado encontrarás para no hablar por ti mismo en el momento crucial? ¿Cómo el Espíritu Santo por tu boca me hablará? ¿Cómo no romper el pacto y al final perseverar? Demonio, mundo y la carne te van a hacer fracasar, sólo mi gracia es más grande, sólo con ella podrás. ¿Quién es mi gran mediadora que mi gracia te dará? Mi Madre, corredentora, en flaqueza... invócala.

Jn 1:1-18. "Verbum caro factum est". "El Verbo se hizo carne".

Desconocían a Dios hasta que bajó del cielo, a la carne forma dio, por mí vivió, por mí ha muerto. Dios por María llegó, el milagro hizo en su carne, cuando el fiat pronunció el Verbo en su seno nace. ¿Podré también dar fiat yo? ¿Dejaré en mí obrar al Verbo? ¿Cambiaré mi corazón de piedra en carne converso? Resolveré la cuestión, al Niño Jesús observo. ¿Cómo es posible que Dios se muestre así de pequeño? Voy a pedirle perdón, en el pesebre te rezo, perdona mi indecisión y por haber sido un necio. María, ¿puedo besarlo? He perdido mucho tiempo, no pararé de adorarlo, en mi carne nace el Verbo.

Lc 1:26-38. "Non erit inpossibile apud Deum". "No será imposible junto a Dios".

Con Dios nada es imposible, no por nuestras propias fuerzas, la fe nos hace invencibles, lo saben los que gobiernan. ¿Por qué crees que quitan cruces y no para la invasión? Te controlan con los móviles y aún ves la televisión. El ruido te deja tonto y no escuchas el silencio, te crees que lo sabes todo pero te están sometiendo. Cuando vas a levantarte meten un poco de miedo y de nuevo eres cobarde, otra vez a tu agujero. Dejaste a Cristo, despierta, fuente de tu salvación, y viene tu decadencia, te han quitado lo mejor. Vuelve a la fe, es la hora, investiga esos misterios, Cristo por la puerta asoma, aún puedes reconocerlo. Creo en Cristo y en la Virgen, me di cuenta, tuve suerte, hay que volver al origen, invencible, ya no hay muerte.

Lc 1:57-66. "Impletum est tempus". "Se cumplió el tiempo".

Se te está cumpliendo el tiempo para que sueltes la lengua, falta poco tras Adviento para que el Niño ya venga. Y tú sigues sin hablar a quienes tienes muy cerca de que viene Navidad, tú dices "Felices Fiestas". Sigues sin hablar de Cristo, tienes o miedo o vergüenza, te has plegado al enemigo que ya domina el planeta. Proclama al Niño Jesús, que todo el mundo lo vea. ¿Vas a seguir mudo tú dejando que te sometan? Como un pastorcillo iré hacia el portal de Belén y a Jesús adoraré con María y San José. Te invito a que no te calles, te llama, está a la puerta, si tu corazón le abres la puerta del cielo abierta.

Lc 1:46-56. "Magnificat". "Ensalza".

Con tu fiat María abriste la membrana cantando tu Magnificat empieza la mañana . Eres puerta del cielo y Dios en ti se encarna, quitaste nuestro velo y Dios a ti te ensalza. Eva fue confundida, pecó y fue expulsada, con tu sabiduría nos devuelves la gracia. Das a luz vida eterna, quien quiera puede hallarla, del cielo eres la Reina, los ángeles te alaban. El Espíritu Santo te desborda de gracias, rezando tu rosario la gloria nos alcanzas. Encuentra protección quien a ti se consagra, danos la salvación, que el Niño pronto salga.

Lc 1:39-45. "Exultavit in gaudio". "Saltó de alegría".

Generosa y diligente, rauda se pone en camino para ayudar a su gente, no importa que espere un niño. La Virgen María te habla y lo hace con cariño, se dirigirá a tu alma porque tú eres su hijo. Único bajo su manto, como a Cristo te ha parido, parto de Espíritu Santo, con sus gracias has crecido. Es tu Madre espiritual, trajo a quien te ha redimido, solo no te va a dejar, va a correr siempre en tu auxilio. Llenas todo con la gracia, lo que tocas se hace santo, das amor, fe y esperanza, siempre entonaré tu canto. Si supierais cuánto os amo lloraríais de alegría, es el amor que te tiene María Virgen Santísima.

Lc 1:26-38. "Secundum verbum tuum". "Según tu palabra".

Esperó con humildad, inefable amor de madre, que se haga su voluntad, la Palabra de Dios Padre. Fe infinita en la Verdad, la Palabra se hizo carne y cambió la humanidad cuando se retiró el ángel. Por toda la eternidad la más pequeña es más grande, todos te venerarán en mañana, noche y tarde. El Niño Jesús vendrá de tu seno impenetrable, tus pechos lo alimentarán, Dios quiere en ti retozarse. De pequeño aprenderá de ti y san José su padre, y tú a su lado estarás hasta que en la cruz nos salve. Esta esclava reina ya, soy esclavo en lo que mande, Reina de la realidad por voluntad de Dios Padre.

Lc 1:5-25. "Occultabat se". "Se ocultaba".

Cinco meses sin salir tras concebir a su hijo, quiso agradecer así el milagro que Dios le hizo. Santa Isabel se ocultaba, ¿cómo ha sido este prodigio? Meditando en Dios estaba recogiendo sus sentidos. Distracción y ocupación, no para el mundanal ruido, viviendo esta situación, ¿cómo ser agradecido? Enfría y calma tu mente y búscate en lo escondido, es hora de que te encuentres porque te habías perdido. Reclúyete, haz oración, apaga ese griterío que te embota el corazón y te aparta del camino. Desenchúfate del mundo, silencio, calma y olvido, deja que el Niño Jesús sane el corazón herido.

Mt 1:18-24. "De Spiritu Sancto". "Del Espíritu Santo".

María esperaba un hijo por el Espíritu Santo, José no se sintió digno, la repudiaría en privado. No quería difamarla pues la Virgen era santa, y José mucho la amaba, ¿cómo hacerlo sin dañarla? Un ángel en sueños le habla, le dice "No tengas miedo, ponle por nombre Jesús pues Él salvará a su pueblo". Al despertar obedece, se fue a buscar a María, José en su casa la acoge, "Te amaré toda mi vida". Yo pensaba en otros planes y se apareció María diciendo que trae a su Hijo y que a mí me necesita. Necesita que la cuide, que la ame y que la obedezca para que el Niño Jesús dentro de mi corazón crezca.

Juan 1:6-8,19-28. "Johannes". "Juan".

Alegrao s, que ya viene, soy testigo de la luz, voz que grita en el desierto para que la escuches tú. Alegraos, ya está aquí, acercaos a la fe, sacerdotes y levitas preguntadme si queréis. ¿Quién eres tú, el Mesías? No soy yo. ¿Eres profeta? Si a quien queréis es a Elías ya podéis daros la vuelta. Para que tú te conviertas sólo bautizo con agua y te vuelvas al que viene con bautismo de la gracia. Al que viene no soy digno de desatar su sandalia. Todo esto decía Juan, esto pasaba en Betania. En el portal de Belén en unos días de nada verás a Jesús nacer. Imita a Juan, poco falta.

Mt 17:10-13. "Restituet omnia". "Restituirá todo".

San Juan último profeta con Espíritu de Elías, Cristo mandará a la Reina antes de su gran venida. La Reina de los Profetas, la Santa Virgen María, nos avisa de la era que ya pronto se avecina. Aplastará la cabeza de quien tanto nos envidia, y nuestra pasión suaviza, como una madre nos cuida. Con su dulzura sujeta, la ira de Dios ralentiza, la mano de su Hijo aprieta, te da tiempo a que corrijas. Pero el momento ya llega, tal profanación indigna que Cristo no lo tolera y arrasa con la perfidia. Si queréis misericordia sed dóciles a María; Cristo, el Espíritu Santo y Dios Padre nos la envían.